De belleza infinita, Carolina.
Sonrisa blanca y perfecta, capaz de hacer que algo malo se convierta en bueno.
Sólo con mirarla.
No para de crecer, Carolina.
Con una gran capacidad de convicción. Es capaz de crear ganas que hace solo un segundo, ni existían.
De la familia, Carolina.
No sólo por todos los año que nos conocemos. Ella es de la familia, de verdad.
Cuñada.
Mi sustento, Carolina.
Mi viga, mi aguante. Con un fuerte apretón de manos me hace sentir que lo malo pasará rápido, a su lado.
Ojos que iluminan, Carolina.
Ella te mira y brillas. Porque es así, aunque ella ni se da cuenta.
Parece que con ellos, no existen los altibajos.
Mi lorito, Carolina.
Porque es imposible mantenerla en silencio.
Pero… qué sería de mí, si ella no llenara mis silencios.
1 comentario:
Tremendo post!!
Ferchu
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